El otro día venía caminando por la calle y un señor me detuvo para intentar venderme una cartera vieja. Yo justo venía haciendo una lista mental de mis necesidades y una cartera no formaba parte de ella. Sin embargo el hombre me entretuvo por lo menos 20 minutos durante los cuales conversamos de un montón de cosas. Primero me aclaró que no era un ladrón, se dedicaba a vender medias, pero como camino a su casa se había encontrado aquella bolsa, pensó en intentar liquidarla para redondearse. Sentí un poco de admiración por aquel hombre que vendía con tanta facilidad (últimamente tengo mucha curiosidad por el sistema capitalista) y le pedí que me diera algún consejo para ser así. ¿Así como? -me preguntó él. Pues vendedor respondí.
El hombre se soltó a elaborar sobre cómo él lo había tenido todo: Carros, fiestas, dinero, negocios. Pero al final es todo un juego ¿Viste? Ahora yo me hago 100, 150 pesos al día y ya está. Me voy a casa. No necesitamos nada ¿sabés? Es todo un invento, una idea...
Así siguió relatando una fabulosa historia que cierta o falsa, me tenía encantada. De pronto el hombre me miró con sus penetrantes ojos azules y se me acercó mucho más de lo socialmente permitido entre dos extraños. ¿Sabés cuál es el secreto?
El resto de la conversación no la publico. Pero si en 6 meses llego a estar en algún top 10, saco el libro de autoayuda y prometo ante ustedes hermanos que le doy la mitad de las ganancias a él.
Nota: Dígan ustedes si su look no es de un ganador absoluto!!
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